El Seminario Internacional del Observatorio Atalaya “La cultura vista desde los observatorios”, celebrado en la sede de la Universidad Pablo Olavide (UPO) en Carmona; ha tratado en esta ocasión sobre los observatorios culturales, contando para ello con la participación de responsables de las áreas de extensión y cultura de varias universidades españolas y extranjeras.
La inauguración del acto fue presidida por Manuel Torralbo, director general de Universidades de la Junta de Andalucía; Juan Manuel Suárez Japón, rector de la Universidad Internacional de Andalucía (UNIA); Elodia Hernández, vicerrectora de Cultura, Participación y Compromiso Social de la UPO, y Marina Gutiérrez, vicerrectora de Proyección Social, Cultural e Internacional de la Universidad de Cádiz. El seminario, que ha contado con financiación de la Secretaría General
de Universidades de la Junta de Andalucía, fue clausurado por su titular, Francisco Triguero.
El encuentro, organizado por la UNIA y la UCA, lo abrió Alfons Martinell, director de la Cátedra UNESCO de políticas culturales y cooperación de la Universitat de Girona, quien cuestionó la utilidad de las políticas culturales actuales, debido a la actual crisis del modelo de Estado, al tiempo que puso el acento en que estas políticas culturales no están basadas en
derechos y que existe un alejamiento de la sociedad, "verdadero y activo
agente cultural".
La presentación de Lurdes Aranguren y de Xavier Fina, del Observatorio Vasco de la Cultura, y la intervención de Vincent Guillon, del Observatorio de Políticas Culturales de Grenoble (Francia), puso de manifiesto las principales líneas de actuación de este tipo de
instituciones: sistemas de indicadores con series estadísticas sobre
distintos temas y estudios cualitativos sobre tendencias, sectores o el
propio contexto.
Por su parte, Antonio Ariño, sociólogo y vicerrector de Cultura de la Universidad de Valencia, señaló que "los retos futuros de un observatorio son la innovación y la crítica, una
apuesta por generar una cultura abierta, por generar hábitos y consumos
culturales críticos y por realizar una labor importante de prospección
que ayude a la toma de decisiones culturales", afirmación con la que coincidieron los demás ponentes.
La Consejería de Economía, Ciencia y Empleo de la Junta de Andalucía encargó a finales de 2005 a los vicerrectorados de Extensión de las universidades andaluzas la puesta en marcha del proyecto Atalaya, que intenta poner en valor iniciativas innovadoras que, unidas a las ya existentes, han surgido bajo el espíritu del trabajo en red de las 10 universidades andaluzas. Con el desarrollo de este seminario se pretendía reflexionar sobre el momento que vive la cultura en nuestro país y en otros países a partir de la mirada privilegiada y ordenada que ofrecen los observatorios.
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