“LuZes Diálogos en La Rábida” analiza las causas de la crisis alimentaria mundial

El ciclo de conferencias organizado por la UNIA en su Sede de la Rábida, LuZes Diálogos, ha contado con la participación de Manuel Delgado Cabeza, catedrático de Economía de la Universidad de Sevilla, que a través de la conferencia ‘La crisis alimentaria, parte de la crisis global’, explicó a los alumnos las relaciones entre economía y territorio, así como el análisis de los mecanismos desde los que se generan las desigualdades territoriales.

El profesor estuvo arropado en su conferencia por el director de la Sede Iberoamericana, Alfonso Vargas, y la catedrática de la Universidad de la Habana, Oneida Álvarez Figueroa, que fueron los encargados de introducir al conferenciante narrando a los alumnos una breve biografía del mismo y haciendo hincapié “en la importancia del tema que abordamos esta tarde y la necesidad de intentar buscarle una solución”, tal y como apostilló el director rabideño.

Bajo el punto de vista de Manuel Delgado, la crisis alimentaria ha precedido a la financiera, pero “con la llegada de la segunda se ha agravado la primera al producirse una subida de los alimentos y una transformación de los mismos en objeto de especulación”. Además, para él “el ámbito económico ha invadido todos los aspectos de la vida y eso lo convierte en algo patológico”.

Para Delgado, “la crisis procede de la mala forma en la que hemos organizado todo, es una construcción social y no el resultado de un problema técnico, por este motivo tiene que ser el hombre el que resuelva la situación, no podemos esperar que la técnica resuelva la situación actual”.

El catedrático sevillano prosiguió analizando los motivos por los que sociedad mundial actual ha llegado a esta situación, para él “la crisis es el resultado de relacionarnos nosotros mismos y la naturaleza, por eso sólo averiguando cuáles son los flujos y las energías implicadas podremos encontrar una solución al problema”.

De hecho, según Delgado “es un error intentar encontrar la solución en la economía tradicional porqué ella misma viene mostrando deficiencias desde hace muchos años, como la crisis financiera que estamos viviendo ha demostrado”.  “El construir un modo de entender la economía que oculta los costes se traduce en la crisis alimentaria”, apostilló.

El divorcio entre economía y naturaleza viene desde un principio, “los principios bajo los que ha sido construida la economía son contrarios a la naturaleza, mientras la economía es cerrada, busca el equilibrio, trasforma los recursos, etc., la naturaleza es todo los opuesto, abierta, desordenada, …”.

Pero sin duda la raíz del problema de crisis alimentaria no radica en la escasez de alimentos si no en la dificultad por parte de unos pocos de acceso a los mismos. “El sistema actual de acumulación no tiene por objeto la simple satisfacción de las necesidades y ahí radica el problema”, según Manuel Delgado, que profundizó aún más añadiendo que “la lógica de hoy en día prioriza el tener sobre el ser, algo que propicia la desigualdad y priva a la mayoría de la población de llagar a los recursos”.

Pero sin duda la mayor paradoja que explicó el profesor fue “nunca ha habido más alimento que en la actualidad, pero tampoco nunca hemos tenido unas tasas tan altas de hambruna”. De hecho, dio un dato sobre ésta cuestión: desde los años 60 la producción de cereales se ha multiplicado por seis, mientras que la población sólo por tres.

La distribución territorial también es otra de las paradojas que afectan a esta cuestión ya que “los países del sur son los que tienen una mayor crisis alimentaria, incrementada en la zonas rurales, y precisamente allí es dónde tienen una economía mayoritariamente agraria y donde producen más cantidad de alimentos” .

Para terminar, Manuel Delgado, dejó en el aire una reflexión que es sin duda la clave de la situación actual “el despilfarro de uno vincula a la escasez de otros”.