La Sede Iberoamericana trata la Bioinformática dentro del Máster de Biotecnología Avanzada
La Sede Iberoamericana Santa María de La Rábida ha desarrollado esta semana dentro del Máster Oficial en Biotecnología Avanzada, el módulo presencial relativo a la Bioinformática, que ha sido coordinado por Enrique Viguera, de la Universidad de Málaga. Módulo que a su vez se convierte en Máster Oficial en Bioinformática realizado a través del campo virtual de la Sede Tecnológica de la Universidad Internacional de Andalucía y que está dirigido por Oswaldo Trelles.
Partiendo de uno de los principales objetivos que contempla el Máster Oficial en Biotecnología Avanzada, como es el de poder contar con un importante desarrollo tecnológico e informático que consigan avances dentro de los diversos campos de estudio y trabajo para la mejora del funcionamiento de los seres vivos, la Sede Iberoamericana ha contado con un módulo dedicado a la Bioinformática, donde han estado presentes el coordinador del mismo, Enrique Viguera, que ha tratado el tema: “Hasta que punto la Bioinformática ha revolucionado la comprensión de los sistemas biológicos”; Antonio Pérez, quien puso de manifiesto las aplicaciones de la Bioinformática en el ámbito biosanitario y Oswaldo Trilles, quien trató la Bioinformática en las tecnologías “ómicas”.
La idea principal en la que han coincido los tres especialistas en el tema es la de tener la seguridad de que “a lo largo de la Historia de la Ciencia, los seres vivos se han observado y analizado desde muy diversas perspectivas. Inicialmente se distinguían por sus propiedades macroscópicas externas (tamaño, formas, número de hojas o patas, capacidad de reproducción cruzada, etc.). A partir de mediados del siglo XX, como consecuencia de la identificación del material genético y el avance de las técnicas analíticas de partículas submicroscópicas, comenzó una carrera frenética por aislar, caracterizar y comparar todos los elementos componentes de un ser vivo, desde una aproximación bioquímica y molecular.”
Esto nos lleva, según los expertos, a que con el advenimiento de las técnicas de secuenciación de genomas (material genético de un organismo) estamos siendo testigos del nacimiento de una nueva etapa: la Bioinformática y su aplicación a la Biología de Sistemas.
Quizá los ejemplos más claros de los beneficios de esta simbiosis entre Biología Molecular y Computación, asegura el profesor Oswaldo Trelles, lo constituyan los proyectos llamados en conjunto “Ómicos”: “Los proyectos Genoma pretenden organizar espacial y funcionalmente todo el genoma de un organismo determinado. Genomas, que en el mejor de los casos, están compuestos por miles de residuos de nucleótidos (bases) polimerizados con una secuencia determinada, y en el caso de genomas más complejos, como el humano, puede alcanzar la cifra de varios miles de millones de pares de bases que codifican y regulan la expresión de varias decenas de miles de proteínas distintas en una sola especie. Sin la ayuda de procesadores de texto y software específico para el análisis automatizado de estas secuencias, la tarea de caracterizar un genoma sería una tarea a muy largo plazo y sin embargo, la velocidad con la que se están concluyendo este tipo de proyectos para distintos organismos está aumentando exponencialmente, gracias al desarrollo de una nueva área de especialización tecnológica denominada Bioinformática, utilizada como sinónimo de Biocomputación”.
En definitiva, los proyectos genoma y las tecnologías “Ómicas”, como afirma el profesor Trilles, “proporcionan miles de datos que suponen fragmentos de información para llegar a comprender a los seres vivos. Cuando esto se consiga, estaremos preparados para atajar los distintos problemas biológicos en sus dianas más efectivas”.
Por su parte, el coordinador del módulo, Enrique Viguera, aseguró que una vez que el “genoma humano” fue presentado a la sociedad y en particular a la comunidad científica, fue cuando la Bioinformática tiene un papel muy importante.
Viguera, explicó la definición de la Bioinformática, como el uso de técnicas y herramientas computacionales para el análisis de la información biológica. Es una nueva disciplina, nacida para cubrir la necesidad de manejar las ingentes cantidades de información provenientes, tanto de la secuenciación de las macromoléculas (ADN, proteínas y glúcidos) como de las técnicas de análisis masivo del comportamiento de genes y proteínas.
El auge de la Informática junto con el establecimiento de Internet y de las bases de datos
moleculares ha posibilitad, hace hincapié el coordinador, en estos últimos años, el estudio de la información genética con el desarrollo de programas que aceleran el análisis de numerosas variables. “Así por ejemplo, asegura Viguera, puede leerse toda la secuencia de moléculas que compone el genoma de un organismo, es decir, el 'manual de instrucciones' que rige la formación del mismo y es posible la observación de su comportamiento dinámico bajo diversas condiciones experimentales.
Es en este contexto en el que la Bioinformática se muestra como una de las áreas científicas de mayor actividad, dinamismo y actualidad, puesto que responde a las necesidades básicas de conocimiento, y en un área prioritaria de los planes de investigación europeo, nacional y autonómico. Este Programa de Master Oficial surge como respuesta a las demandas de conocimiento y viene, además, a suplir la carencia de una línea de formación oficial - en el ámbito nacional -en esta materia.