Los rectores de las universidades Pablo de Olavide (UPO) e Internacional de Andalucía (UNIA), Francisco Oliva y José Ignacio García, y el director del Instituto Andaluz de Patrimonio Histórico (IAPH), Juan José Primo, han inaugurado una Sala de Conservación del Patrimonio Mueble en la que se va a preservar y exponer patrimonio proveniente de las instalaciones de la Universidad Laboral de Sevilla. Los más de 60 objetos, en su mayor parte utilizados para la docencia de los estudios técnicos que se impartían, se han recuperado gracias al proyecto Atalaya, dentro del programa `Patrimonio Cultural de las Universidades Andaluzas’.
Oliva ha declarado que, “en la UPO, somos conscientes de lo que tenemos en el campus y de la importancia de proteger la memoria, por lo que conservarla es fundamental para saber de dónde venimos y cómo era la formación que se impartía en aquellos años” (el primer curso fue el de 1956/57).
Al acto de presentación han acudido Rafael Areste, Alfonso Bueno y Manuel Gil, antiguos alumnos de la Universidad Laboral, así como David Cobos, vicerrector de Cultura y Políticas Sociales de la UPO, quien ha recordado que la Universidad Laboral fue un campus muy moderno para la época, y Julia Benítez, técnica especialista en diagnóstico del patrimonio histórico; que ha descrito cómo se llevó a cabo la fase documental “que ha permitido reconstruir la vida diaria que se hacía en la Laboral“.
Los objetos que pueden verse en esta sala han sido identificados y catalogados en el marco del proyecto Atalaya, coordinado por la UNIA con la colaboración del IAPH. El Vicerrectorado de Cultura y Políticas Sociales de la UPO ha coordinado los trabajos que han permitido contar con la sala de conservación.
Entre las piezas expuestas, que podrán verse también en visitas guiadas, se encuentran instrumentos como un oftalmoscopio, un termógrafo, un espirómetro, un compás cefalométrico y un electroimán oftalmológico, todos ellos utilizados para una formación que abarcaba la iniciación profesional, el Bachillerato Superior General y Técnico, la maestría y el peritaje industrial y, ya en su etapa final, ingenierías técnicas en campos como la química, la arquitectura, las explotaciones agropecuarias o la ejecución de obras.
